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Todos los niños tienen días difíciles: hacen berrinches, se enojan o desobedecen. Es parte de su proceso de crecimiento y aprendizaje. Sin embargo, cuando estas conductas se repiten con frecuencia, afectan la convivencia familiar o escolar, o no mejoran con el paso del tiempo, podría ser momento de considerar apoyo profesional.
La terapia de conducta no es solo para «niños problemáticos»; es una herramienta útil para comprender lo que hay detrás del comportamiento, desarrollar habilidades emocionales y mejorar la relación entre padres e hijos.
A continuación, te compartimos señales comunes que podrían indicar que tu hijo necesita apoyo especializado.
🚩 Señales de que tu hijo podría beneficiarse de una terapia de conducta
1. 😠 Berrinches intensos y frecuentes
Si los berrinches ocurren a diario, duran mucho tiempo o son muy intensos (gritos, agresión, autolesiones), puede ser una señal de que tu hijo necesita ayuda para autorregular sus emociones.
2. 🙅♂️ Desobediencia constante
Negarse a seguir instrucciones, retar continuamente a los adultos o ignorar normas básicas, incluso después de múltiples intentos de corrección, es una conducta que requiere atención.
3. ⚠️ Agresividad hacia otros
Golpear, morder, empujar, romper cosas o maltratar animales son señales que no deben pasarse por alto. Estos comportamientos pueden ser expresiones de frustración o ansiedad que no logra expresar con palabras.
4. 🧍 Aislamiento o dificultad para relacionarse
Los niños que evitan jugar con otros, tienen miedo excesivo de hablar, o no logran adaptarse a contextos sociales (como la escuela), pueden estar lidiando con problemas de autoestima, ansiedad o habilidades sociales no desarrolladas.
5. ⏳ Dificultad para controlar impulsos
Interrumpir, gritar, correr sin motivo, no respetar turnos o actuar sin pensar son señales frecuentes en niños con dificultades de autorregulación. En algunos casos, pueden estar relacionadas con trastornos como el TDAH.
👨👩👧👦 ¿Y si mi hijo solo está “pasando por una etapa”?
Es cierto que el comportamiento infantil cambia con el crecimiento. Pero cuando esas conductas afectan su vida diaria, sus relaciones o su aprendizaje, no es solo una etapa: es un llamado de ayuda.
La intervención temprana puede evitar que pequeños problemas se conviertan en desafíos mayores más adelante.
🧠 ¿En qué consiste una terapia de conducta?
La terapia de conducta infantil es un proceso guiado por un especialista en psicología o intervención emocional. Se basa en:
- Observar el comportamiento del niño.
- Entender las causas y factores que lo provocan.
- Enseñar nuevas formas de expresarse, resolver conflictos y relacionarse.
- Involucrar a madres y padres con estrategias prácticas para aplicar en casa.
🤝 En nuestro centro: disciplina con amor, guía con respeto
En el Centro General de Intervención en el Desarrollo, ofrecemos terapia de conducta con un enfoque afectivo y profesional. No buscamos castigar ni reprimir, sino entender, acompañar y transformar.
Cada sesión es personalizada, basada en el respeto por el ritmo y la historia de cada niño.
📌 ¿Sientes que ya no sabes cómo manejar la conducta de tu hijo en casa o en la escuela?
Te escuchamos. Agenda una evaluación inicial gratuita y recibe orientación profesional.
